Contador de visitas

clocks for websitecontadores web

viernes, 1 de julio de 2011

Capítulo 15 ** You are so beautiful** Escape the Fate!

……………………………………… (12 años atrás – LIAM)
-Que no vuelva a ocurrir – le regañó el padre a su hijo pequeño de 7 años – No puedes ir por ahí cogiendo cosas que no son tuyas.
-Lo siento – dijo Liam aparentemente apenado.
-¿Qué pensaría Alana si lo descubriera? Se pondría muy triste e incluso se enfadaría.
Liam agachó la cabeza, esta vez sintiéndolo de veras. Su padre al verlo tan apenado suavizó su tono. Suspiró y le dio un coscorrón cariñoso en la cabeza.
-Por esta vez pase – le dijo el señor William – ahora ve a jugar con Alana – le revolvió los pelos al chico mientras sonreía cariñosamente.
Liam dedicó una sonrisa a su padre de oreja a oreja y salió corriendo alegremente hacia el jardín. Sabía exactamente los sitios a los que le gustaba ir a Alana y uno de esos era el jardín. Además, era primavera y todas las flores estaban abiertas de par en par compitiendo por ver quién era la más bonita.
-“Aunque – pensó Liam girando la esquina y llegando al lugar donde se encontraba Alana – lo más bonito que hay aquí no es una flor” – Liam sonrió divertido, en su vida diría ese comentario tan cursi delante de Alana.
La niña estaba sentada en una gran roca de espaldas. Su cabello negro rizado le caía en cascada por media espalda y unos mechones estaban recogidos en un lacito rojo. Llevaba un vestido rojo con flores blancas por encima de la rodilla. A juego calzaba unos zapatitos de charol. Estaba tarareando una melodía mientras seguía con la mirada a una mariposa que revoloteaba por allí. Liam se le acercó sigilosamente por detrás
-Tengo una sorpresa para ti – le dijo el chico a Alana al oído.
La niña se sobresaltó pero al comprender quién era se giró rápidamente muy contenta.
-¡Li! – gritó la niña mientras le daba un fuerte abrazo - ¿Una sorpresa? ¡¿Cuál?! ¡¿Cuál sorpresa?! – se puso a dar saltitos.
-Vale, vale – rio Liam – contrólate.
-¿Qué me has traído? – preguntó Alana sin poder contenerse - ¿una flor? ¿Un dulce? ¿Una chuche?
-Frio, frio – sonrió – cierra los ojos.
Alana obediente lo hizo. Liam conteniendo la risa se puso tras ella y le pasó una cadenita de plata por el cuello. Con cierta dificultad consiguió cerrar el broche. Después corriendo se puso de nuevo frente a ella. La niña, notando el peso del colgante, se llevó la mano a éste y puso una expresión extrañada aún con los ojos cerrados.
-Ya puedes abrirlos – le indicó el chico.
Con una mirada curiosa Alana observó el regalo. Era un candado muy bonito y elegante. Tenía una “L” verde grabada y relieves vegetales decorandolo. La niña observó fascinada al chico.
-Mira, yo también tengo esto – Liam se llevó la mano al collar que tenía y se lo mostró. Era una pequeña llave muy bonita con una “A” plateada grabada.
-¡Ohh! ¡Que guay! – exclamó Alana abriendo mucho los ojos.
-Me dijo mi papá que esto era de tu familia – explicó – y vi que las letras eran las mismas que nuestros nombres.
-¡Guala! – gritó Alana con los ojos brillantes – es verdad. Pero ¿Por qué tú tienes la “A” y yo la “L” si mi nombre es Alana?
-Porque así yo te tengo a ti y tú me tienes a mí – dijo Liam - así te acordarás de mi cuando lo veas.
-Pero si yo siempre me acordaré de ti – susurró tímidamente Alana bajando la cabeza – además, nunca nos separaremos.
Liam rió y le dio un abrazo torpemente.
-¿Y esto por qué no se abre? – se extrañó Alana intentando abrir el candado.
-Tonta, necesita la llave – le indicó Liam impaciente. Intentó coger el colgante de la niña, pero ésta le dio un manotazo.
-¡No me llames tonta! – Refunfuñó – Retíralo.
-Vaaale – se rindió el niño. Liam fue a alargar la mano para coger el candado pero se quedó a medio camino, mirando a Alana con cara de niño travieso – Bueno, lo abro si me dices que me quieres.
-Nooo – dijo la niña roja como un tomate. Le daba vergüenza.
-Pues entonces no lo abro – se burló Liam sacándole la lengua
-Jooo, vale… - y dijo en un susurro casi imperceptible – te quiero…
Liam lo oyó perfectamente pero como siempre, quería hacer de rabiar a Alana un poco más.
-No te he escuchado, ¿Qué has dicho?
La niña cogiendo aire y poniéndose de pie gritó:
-¡Te quiero!
-Eso está mejor – respondió Liam satisfecho. Alana volvió a sentarse en la piedra muy contenta.
Liam finalmente cogió el candado, metió su llave en él, y con un suave movimiento de muñeca, abrió el candado escuchándose un suave “clic”. Alana miraba fascinada.
-¿Ves? Siempre que me permitas abrir el candado, sabré que me quieres – se llevó la mano a la espalda donde había un gran rosal, arrancó una bonita rosa roja y se la ofreció a la niña que la cogió, entonces añadió el niño:
………………………………………………….. (LIAM)
-El destino nunca nos separará. Estaremos juntos para siempre – terminó Liam, iluminado por el fuego de la hoguera.
Todo se quedó silencioso, Alana lo miraba con los ojos brillantes, sin saber que decir. Él la miraba muy intensamente.
-¿Por qué me haces esto…? – Dijo Alana en un susurro, notando que le faltaba el aire - ¿Por qué me lo recuerdas justo ahora?
-Porque no quiero que lo olvides nunca, no quiero que olvides que siempre estaré enamorado de ti…
Alana se levantó con enfado y le reprochó:
-¡No dijiste lo mismo cuando tenías diez años!
Liam la miró con cara de dolido, pero no le dijo nada, solo cerró los ojos y apoyó la cabeza en el tronco, abatido.
-… Lo peor de todo es que tienes razón.
-Entonces ¿Todo esto a que viene? ¿Acaso no crees que lo estoy pasando ya bastante mal para que ahora vengas tú a reírte de mí?
-Nunca he querido hacerte daño… - Liam no se atrevía a mirarla a la cara.
-Pues menos mal que no has querido – soltó irónicamente – si llegas a quererlo ya me matas del todo.
-Alana, yo…
-¡Basta! – a Alana empezaron a caerle las lágrimas – No quiero escuchar más escusas y mentiras – se sentó junto al fuego, lo más apartado posible del chico, muy abatida. Liam que al escucharla sollozar, levantó la mirada, muy sorprendido. El chico sin saber qué hacer, se levantó y empezó a dar vueltas alrededor de la hoguera.
-Bueno, no sé si me vas a escuchar, pero te pienso responder aunque no quieras.
La chica cerró los ojos fuerte para evitar mirarlo.
…………………………………………………………….. (LIAM)
Como ya sabes, cuando cumplí los 10 años ingresé en Battle Cross para instruirme como un cazabrujas, aunque eso tú no lo sabías. Mis padres se sintieron muy orgullosos de que por fin hubiera entrado en aquél colegio y me empezaron a tratar con más seriedad. Yo como regalo de “despedida” les pedí que me contaran la historia de tu familia, ya que siempre la habían llevado en secreto, y además después podría contártela a ti. Mis padres acabaron accediendo y me lo contaron todo. Me enteré de la relación de tu madre y mi padre, los ataques de histeria de tu madre, las peleas , el… aborto de mi madre… todo esto me impactó y me asustó mucho. Inconscientemente empecé a culparte a ti de la muerte de mi hermano, como si tu fueras tu madre… no me siento para nada orgulloso de ello, pero tienes que entender que con 10 años tampoco razonaba mucho. A esto se le sumó que en Battle Cross nos contaron que muchos brujos eran malos y  despiadados, y que mataban a mucha gente. Cuando me lo contaron pensé directamente en tu madre. Me enteré de que serías una futura bruja aunque tus poderes se estaban retrasando. Tuve miedo por ti, en lo que te convertirías si seguías los pasos de tu madre. Pero lo que realmente me puso contra ti fue… Un día mi madre llamó por teléfono a Alan, que seguía con mi tía lejana, y tuve que hablar con él a petición de mi madre. Este empezó a manipularme y acabó convenciéndome de que tu tenías la culpa de todo, de que tarde o temprano te olvidarías de mí, te convertirías en una mala persona, que me harías daño a mí y a mi familia… Al final me convenció y decidí cortar toda relación contigo e intentar despreciarte para alejarte de mi familia.
Con el paso del tiempo, me volví más maduro y empecé a entender que había estado equivocado y que seguías siendo la misma, que tú no eras tu madre. Cuando quise arreglarlo ya era demasiado tarde. Habías madurado y parecía odiarme cada vez más, no supe cómo reaccionar ante esto.
………………………………………………………….. (ALANA)
-¿Y tú te crees que para mí  fue fácil? – le recriminó Alana mirándole mientras lloraba – tú eras lo que más quería en el mundo y de la noche a la mañana empezaste a despreciarme, me mirabas con odio, cada vez que me acercaba a ti me apartabas como si fuera un monstruo – la voz empezó a temblarle. Alana vio que cada una de sus palabras eran como un puñal para Liam, pero siguió – y tú no me dabas explicaciones. Empecé a pensar de verdad que había hecho algo horrible, ¿Pero qué? Finalmente no pude aguantar más el dolor que sentía desde hace tanto tiempo y decidí apartarme de ti. Llegué a odiarte… - Alana no pudo seguir hablando. Su llanto le impidió hablar.
Liam, con cara de sufrimiento, no lo aguantó más. Avanzó hacia la chica, tropezando por el camino, y la estrechó en sus brazos susurrándole al oído:
-Perdóname, por favor.
Alana se revolvió y lo apartó.
-Todavía tienes que explicar muchas cosas…
Liam rió pesaroso y siguió hablando.
-Nunca me perdonaré todo lo que te he hecho, como tampoco me perdonaré el haberte dejado ir la noche en la que despertó tu magia.
-Aquella noche, cuando pasó todo, volvieron mis antiguos temores, aunque… en ese momento me di cuenta de que mi mayor miedo era perderte a ti – el chico calló un momento para coger aire.
Alana evitando mirarle, dirigió su mirada hacia el cielo. Era una noche estrellada, era imposible contar todas las estrellas que había en el cielo. Tal vez en otro momento la visión de los astros hubiera tranquilizado a Alana, pero esa noche estaba demasiado impactada. Ni se le habría pasado por la cabeza que todo aquello ocurriera. Todo lo que había estado creyendo durante todo este tiempo… por fin lo entendía todo. Aunque no bastaba para perdonarle.
-Intenté detenerte – dijo Liam rompiendo el silencio – pero desapareciste sin dejar rastro. A la mañana siguiente, cuando dejé de buscarte y volví a casa, tu ropa y tus pertenencias habían desaparecido. Sentí que no volvería a verte nunca y que todo era por mi culpa – el chico pareció animarse un poco más – Ya te daba por perdida hasta el día de la fiesta… apareciste como un ángel ante mí. Fue como un milagro…* Intenté hablar contigo para explicártelo todo…
-Mentira – le cortó la chica indignada – lo único que hiciste fue presionarme para que te dijera algo que tú ya sabías, que yo era una bruja.
-Lo hice porque quería que confiaras de nuevo en mí, aunque veo que no lo he conseguido. Después volviste a huir de mí. No podía dejarte ir otra vez, así que te seguí. Cuando te vi con… - Liam cerró los ojos y respiró hondo antes de volver a hablar – él me sentí…
-Si, - dijo Alana fríamente – ya me acuerdo del numerito que montaste…
-¿Por qué estás con él? – le preguntó el chico sin rodeos.
A Alana esto le pilló por sorpresa y en un principio no supo que decir, después pudo reaccionar.
-Me quiere – contestó la chica. Liam soltó una risotada irónica y respondió:
-Créeme, nadie podrá quererte tanto como lo hago yo – y añadió – y menos él.
-Déjate ya de tanta palabrería, estoy con él porque me quiere, me respeta y lo más importante, no me miente – y viendo que Liam le iba a responder con ferocidad soltó sin poder evitarlo - ¿Y qué me dices de Ashley?
Liam evitó descaradamente aquella pregunta y dándole la espalda se quedó mirando fuego. Alana esperó a que dijera algo pero viendo que no lo iba a hacer soltó:
-Sabes que ya es demasiado tarde, nada de esto te va a servir… no voy a volver a enamorarme de ti.
Liam muy lentamente se giró y lanzó una intensa mirada, con su sonrisa y le dijo mientras se agarraba la llave:
-Tienes razón, no podrás enamorarte de mí otra vez, porque nunca has dejado de quererme.
Alana quiso gritarle, pegarle, decirle todos los insultos posibles, pero no pudo decir nada.
La chica, cansada, se dejó caer en un tronco junto al fuego. Liam cogió su guitarra y sentó junto a ella.
-¿Te importa? – Preguntó Liam señalando la guitarra – siempre quise cantarte ésta canción.
Alana todavía sin poder hablar solo asintió con la cabeza. El chico empezó a tocar los primeros acordes y con su dulce y atrayente  voz comenzó a cantar.
La muchacha reconoció en seguida la canción. Liam siempre la ponía cuando ella andaba cerca. Desde el primer momento le había gustado. Fue entonces cuando empezó a escuchar a aquel grupo. Alana sonrió, siempre había sentido predilección por aquella canción. Cerró los ojos para poder centrar más su atención en ella. Liam entonó el estribillo:
“You are so beautiful,
You are the kind of girl,
That has the chemicals…
That makes me fall in love”
La canción resonaba en todas partes, envolviéndolos como si no existiera nada más. Se pasó el resto de la canción con los ojos cerrados, concentrada en la melodía.
A pesar de que Liam había terminado la canción ella seguía con la melodía resonándole en la cabeza.
Y entonces paso…
Alana notó los cálidos labios de Liam sobre los suyos. La chica asustada abrió de golpe los ojos y se apartó un poco de Liam. Alana se dio cuenta de que por primera vez el fuego no provenía de ella, sino de los ojos de él. No pudo soportarlo más, lo agarró de la llave y lo acercó hacia ella. Liam al principio se quedó sorprendido, pero luego se dejó llevar.
Sus labios se volvieron a unir con pasión. Todos los sentimientos que habían estado guardando todo ese tiempo se canalizaron en aquél beso: amor, odio, pasión, tristeza, celos… pero sobre todo, añoranza.
El fuego de la hoguera aumentó de repente ardiendo con fiereza.
La chica notó que el corazón del chico latía tan rápido como el suyo, notó la suave piel del chico sobre la suya, notó que su fuerza de voluntad desaparecía por momentos… Una parte en el interior de ella ardía todavía un poco de rencor hacia Liam, sin pensar en lo que hacía dirigió ese rencor hacia el labio inferior del chico, mordiéndoselo, llegando a hacerle un poco de sangre. Liam malinterpretando este gesto, la estrechó aún más contra él. El beso se volvió más ardiente. La fragancia de Liam la envolvía mareándola, olía a regaliz rojo y a menta.
Aquel beso no era tan cuidadoso como los de Erik, era… salvaje…
En ese momento se escuchó un fuerte ruido de algo que caía. Ambos se giraron sobresaltados y respirando fuertemente. Allí, clavada en el suelo, estaba Ashley mirándolos boquiabierta.
Alana siendo consciente de que seguía en brazos de Liam se apartó de él como si hubiera recibido una descarga eléctrica. Ashley los miró primero sorprendida, después incrédula y por último muy enfadada. De fondo se escuchó la voz de Erik.
-Jajajaja, Ashley lo que no te pase a ti no le pasa a nadie – comentó alegremente Erik mientras entraba en el claro, ajeno a lo que había pasado. Dirigió su mirada hacia Ashley y le preguntó - ¿Por qué has tirado los troncos? – Después miró a Alana que estaba de pie paralizada - ¿Qué pasa? ¿Estáis todos bien?
Alana pareció por fin reaccionar, pasó su mirada por Erik, después a Ashley, para detenerse en Liam, transmitiéndole un profundo reproche.
-“Por tu culpa” – pensó Alana
Liam, como si le hubiera leído la mente sonrió inocentemente mientras se encogía de hombros.
-Me -Me voy a dormir – dijo la chica mientras se giraba sin dar oportunidad a nadie de decir nada.

FIN DEL CAPITULO ^^

*milagro: Coincidencia, ya que es el mismo título del capítulo en el que se volvieron a encontrar ^^

7 comentarios:

  1. Chias teniais rezon a sido uno de esos apitulos q te dejan O_O OMG!!!
    hehehehe seguir con esos animoos!!! q ya teneis varios fanss!!!!

    ResponderEliminar
  2. jajaja!!! si, nosotras nos emocionamos escribiendolo XD
    y ya k estamos, un saludo y gracias a todos los k nos leeis y seguiis!! ^^

    ResponderEliminar
  3. solo voy a decir una cosa, pero no quiero que nadie se ria de mi... ¬¬
    no se por qué, pero... sí, tengo los ojos llorosos y todavía no lo comprendo, sera que quiero que me pase a mí o no sé... xD

    JOOO tengo ganas de mas, MUCHO MAS! xD
    He visto vuestro video en tuenti..

    ole ole y ole! jajajja escritoras profesionales y GUAAPAS! algo se os fue la pinza pero... xD

    En fin GUAPAS os dejo, esperando al viernes!

    ResponderEliminar
  4. Yo secundo lo que ha dicho My world dreams, también me han salido lagrimillas jajaj y sí, será que también quiero que me pase.

    Bueno, os animo a seguir escribiendo, un beso:)

    ResponderEliminar
  5. jajajajaja! Muchas gracias! yo la verdad, es que me lo he releido y releido y me emociono pechá, todas queremos que nos pase lo mismo U.U
    Y bueno, se nos va la pinza de normal.. peeeero, en el video disimulamos bastante, no querais vernos de normal xDDD
    Y muchas graciaaas!! nos hace muchisima ilusion leer comentarios como el vuestro que nos animas y nos dicen piropos ;) xDDD
    No pero en serio, este capitulo, es un capitulazo, a nosotras nos encanta =D
    Y nada, pues hasta el viernes, un besazo y graciaaaas! =D

    ResponderEliminar
  6. Chicaaas!!!! geniales los ultimos capiis!! ^^
    jo, que bonito el beso... jejejejejeje
    y.. bueno.... lo de Tay... aun sigo sin poder creerlo... TT.TTespero muy muy impaciente el proximo capiii!!
    besooooooooooooooooooooooos!!!!!

    ResponderEliminar
  7. Wii!!
    El beso fue genial, nos tendrías que haber visto a Laura y a mi escribiendolo xDDD
    No nos podíamos estar quietas, y super nerviosas e histéricas xDDDDDDDDD

    ResponderEliminar